sábado, 10 de noviembre de 2012


CIRCULAR NACIONAL Nro. 36

NADIE PUEDE SER JUZGADO POR ALGUIEN QUE IGNORE EL PROCESO.
LEA SIN PREVENCIÓN, Y AL FINAL, DECIDA.

El país judicial sabe, que desde hace varios años, en Asonal Judicial existen dos sectores con su propia junta directiva.  Una, presidida por mí y la otra, por Nelson Cantillo.

Cuando estalló la inconformidad que originó el paro más grande en la historia de la Rama Judicial, inmediatamente, el sector que comando, se puso a la vanguardia de la protesta, en tanto que el otro sector, sacó un comunicado, donde se opuso a la jornada, por considerarla oportunista de nuestro lado, y haberla convocado este sector.  Lo cierto es que la primera semana de la protesta, marchó sin la participación del grupo de Nelson Cantillo, ni ninguno de sus dirigentes.

Por fortuna, hubo cambio de parecer, solicitaron cabida en la mesa negociadora, se les otorgó, y así, el 19 de octubre, el país celebró el acuerdo de UNIDAD DE ACCIÓN de los dos sectores, que se reunieron en Paloquemao, con sus dos juntas directivas, la mesa negociadora y activistas de la mayoría de los edificios judiciales en la capital, y allí la unidad emitió un comunicado que contenía entre otras cosas:

a) El anuncio de la unidad de acción.
b) Que la Comisión Negociadora tomaría como documento base de estudio para reclamar la nivelación, el propuesto por el Consejo Superior de la Judicatura, ajustándolo y mejorándolo en los puntos que estimara pertinente.  Ese estudio sería punto de partida para la Rama judicial y se ajustaría para la Fiscalía.  En ningún momento, nadie, absolutamente nadie, habló de porcentajes salariales para negociar.
c.- Se dijo expresamente en el documento de unidad, que para hacer efectivo el estudio, era necesario darle una tregua de 30 días al gobierno, previa firma del acta respectiva, cumplidos los cuales, las juntas de Asonal y los negociadores debían reunirse con el gobierno, discutir los términos de las propuestas de la comisión, verificar que cumplan las expectativas planteadas y con fundamento en ello, decidir el paso a seguir.
d.- Determinó ese encuentro de unidad, que debía quedar claro en el acta, el compromiso de no represalias de tipo administrativo, salarial, disciplinaria, penal o de cualquier otra índole.
e.- Expresamente acordó ese encuentro de unidad que “la definición última de la hora cero de una eventual suspensión, la reanudación de negociaciones, levantamiento del paro, etc, sería competencia de ASONAL JUDICIAL representada en sus presidentes y la comisión negociadora”, que fue ratificada en esa reunión.

Esa reunión orientó el objeto de negociación en puntos precisos sobre:

I.- Que se reconociera el derecho a funcionarios y empleados a la nivelación y revisión de remuneración establecidos en la ley 4ª de 1.992 en su artículo 14.
2.- Que se precisara la suma de dinero que se destinaría para la nivelación.  El Gobierno había propuesto un billón ciento cuarenta mil millones de pesos en 15 años.  Por nuestro lado, teniendo como referente el estudio del Consejo Superior de la Judicatura, ordenado tener en cuenta en la reunión de unidad, acordamos que fuera un billón trescientos mil millones de pesos, entregables en un plazo máximo de cinco años.
3.- Que la nivelación empezara en enero del próximo año, y que la Fiscalía contara con la misma suma con que cuenta el resto de la Rama Judicial, ello es, ciento veinte mil millones de pesos para iniciar.
4.-Que se integre una comisión bipartita encargada de establecer la forma y porcentajes en que se incrementarán los salarios, vía nivelación o revisión.  Luego del trabajo, el gobierno expediría los decretos respectivos.
5.- Logrado lo anterior, se suspenderá el paro durante el término del estudio de la comisión y la expedición de los decretos, los que evaluaríamos en Asambleas Permanentes y determinaríamos el qué hacer.

Ese compromiso de unidad y la orientación a la comisión negociadora, fue elaborado por Nelson Cantillo, Miguel Vivas, Orlando Chinchilla y Diego Escobar (de la seccional Cali), entre otros.  Se aprobó por unanimidad.

Posterior a ello, cada día se emitía la correspondiente circular en la que se informaba a la base el avance de las conversaciones.

El lunes cinco de noviembre, Nelson Cantillo y yo, como presidentes de los sectores de Asonal, acompañados de Miguel Vivas, y los representantes de la Corporación de Magistrados y Jueces, del sindicato de la Fiscalía y de la Asociación del CTI, nos reunimos con la Ministra de Justicia y exploramos varias fórmulas de acercamiento, las que por nuestra iniciativa, fueron mejoradas, y sobre ellas, el martes siguiente, se reunió la mesa negociadora, y entre todos elaboramos el documento final, contentivo del acuerdo, en cuya redacción participaron Nelson Cantillo y Miguel Vivas, el cual fue leído y aprobado por el gobierno y todos los integrantes de la comisión negociadora. A renglón seguido firmaron los representantes del Gobierno, el Consejo Superior de la Judicatura y el Fiscal General de la Nación. Nos pidieron a los representantes de los trabajadores hiciéramos lo mismo.  Nelson Cantillo se comprometió a firmar al día siguiente, a las dos de la tarde, el Gobierno nos mostró falta de seriedad de nuestra parte porque habíamos informado la competencia exclusiva de la comisión negociadora, pero de todas maneras Nelson Cantillo estrechó la mano del viceministro de trabajo, para sellar el pacto de que a las dos de la tarde del martes siguiente, firmaría el documento.

Con todos los integrantes de la mesa negociadora hicimos rueda de prensa, le anunciamos al país el acuerdo a que habíamos llegado, los dos sectores de Asonal informamos a las bases.  Nelson Cantillo, a través de la circular 08, firmada también por Miguel Vivas, mostró las bondades del acuerdo como una conquista de los trabajadores de la Rama Judicial y del movimiento sindical colombiano (tengo la grabación de cmi y la circular 08 fue ampliamente conocida).

Nociones elementales de la formación de los contratos consensuales como es el que nos ocupa, indican que basta el acuerdo de voluntades para que él exista.  El acuerdo existe, porque se aceptó por los representantes de los trabajadores sentados en la comisión.  Al día siguiente, Nelson Cantillo fue al Ministerio y con la única explicación de que la base no aceptó el acuerdo, se negó a firmar, y aunque ya el acuerdo existía, los representantes de las instituciones participantes en la negociación lo firmamos, porque es un reflejo de las orientaciones dadas a la mesa en el encuentro de unidad del 19 de octubre, sus términos fueron aceptados por todos los presentes en la comisión, y en general obedecía a lo que se discutía, se mejoró y se aprobó.

En un anexo al acuerdo, el Consejo Superior de la Judicatura y el Fiscal General de la Nación se comprometieron a las no sanciones.  El compromiso de la recuperación del tiempo no exige más que la promesa de hacerlo, sin los controles exagerados de paros anteriores.  Así, vendrán pagos de salarios futuros, sin complicaciones.
Ya se integró la comisión técnica bipartita integrada por seis delegados de gobierno y seis por parte de los trabajadores, que serán nombrados por las instituciones que firmamos el acuerdo.

Como el paro fue suspendido, el trabajo de la comisión técnica será socializado con las bases, que seguirán en Asambleas Permanentes, para evaluar las propuestas de distribución de los incrementos, previo a la expedición de los decretos.
Invito a los funcionarios y empleados a repasar las orientaciones dadas por la mesa de unidad para dirigir el proceso de negociación, a que constaten que el acuerdo contiene todos los puntos orientados.  Luego, ignoro la perversidad de quienes participaron de la mesa de negociación, intervinieron en la elaboración del acuerdo final, lo aceptaron, lo informaron, y ahora me tildan de cuanto improperio encuentran. Llegaron a afirmar que me iba del país, que renuncié a Asonal y que me marginaría del proceso siguiente.  El tiempo ratificará que cae más fácil un mentiroso que un cojo, y mostrará de paso, que me sometí estrictamente a la orientación que me fue entregada para negociar, y al final logramos un acuerdo que indudablemente es un gran triunfo para las pretensiones salariales de todo el componente de la Rama Judicial.

Les invito a no dejarse engañar por quienes no han querido entrar en el juego de la unidad de asonal, a evaluar objetivamente lo acordado, a no cuestionar sin conocer el trabajo de la comisión técnica, y a comprender que se ha iniciado con grandeza el proceso de nivelación salarial, y que no hemos renunciado a la organización y a la lucha, para en jornadas futuras mejorar más y más el salario, hasta aproximarnos a la equidad, fuente inspiradora de la ley 4ª de 1.992.

Estén absolutamente convencidos que no me iré del país, no renunciaré a la Organización, que aquí me quedaré y aportaré a luchas futuras en la medida de mis capacidades.
Agradezco a tantos compañeros y compañeras que me dan mensajes de ánimo y han estimulado tanto mi espíritu, hasta permitirme recordar con el asesinado líder Jesús María Valle Jaramillo:

“AQUÍ ESTOY Y ESTARÉ SIEMPRE, EN EL FRAGOR DE LA LUCHA O EN LA QUIETUD DE LA MUERTE”, y al fin decirle al inmortal Pardo Leal, que aproveché mi vida “para vibrar, para luchar”, por lo que he justificado mi paso por la vida.

Llamo finalmente a la Unidad, al sector liderado por Nelson Cantillo, para que acepte lo que siempre hemos propuesto: HAGAMOS UNA ASAMBLEA NACIONAL DE ASONAL, previo a un transparente proceso de elección de delegados que guarde relación con el número de afiliados, dejemos que la CUT integre con los dos sectores el comité de verificación de la Asamblea, y retomemos los verdaderos caminos de la unidad. Cerremos las puertas al odio y que venga la UNIDAD.

Fraternalmente,


Luis Fernando Otálvaro Calle
Presidente Nacional de Asonal
Bogotá, 9 de noviembre de 2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario